Dialogar, dialogar, dialogar

Probablemente nada se mueva hasta las elecciones generales, pero el gobierno central y el Partido Popular tienen que emitir señales de que han entendido la envergadura de un problema político que nunca van a resolver los tribunales

El independentismo ha ganado en Cataluña en escaños pero no en votos. Junts pel Sí ha vencido sólidamente en las elecciones autonómicas aunque necesita de la CUP para llegar a la mayoría absoluta, lo que pone en riesgo la presidencia de la Generalitat para Artur Mas. Pero no ha ganado el plebiscito en que ha querido convertir esta cita con las urnas. En votos, como se miden los plebiscitos, se han quedado por debajo del 50%, en el 47,9%.

Probablemente nada se mueva hasta las elecciones generales, pero el gobierno central y el Partido Popular tienen que emitir señales de que han entendido la envergadura de un problema político que nunca van a resolver los tribunales. De lo contrario, su estrategia electoral de presentarse como los garantes de la unidad de España puede volvérseles en contra. Y puede ocurrirles que en diciembre, o cuando sean las generales, los españoles se pregunten a la hora de votar si deben hacerlo por un partido que en vez de resolver los problemas, los ignora y multiplica.El récord histórico de participación da la medida, en cualquier caso, de que había calado la trascendencia de unas elecciones en las que por primera vez podían ganarlas, y las han ganado, candidaturas que llevaban claramente en su programa una agenda para la creación de un nuevo Estado. Si el viernes decíamos que fuera cual fuera el resultado, hoy se abría unanueva etapa política que obligaba al diálogo, al pacto, el balance final, dos millones de catalanes mayores de edad diciendo que quieren irse, obliga a hacerlo sin excusas ni dilaciones.

Pepa Bueno. La ser.