EL RINCON DE PEPO.

Vi el otoño,

Acercarse sigiloso.

Con su carga de lluvia y de dolor.

Vi olas, estrellarse en las rocas.

Y mientras, danzan los esqueletos,

con la sonrisa forzada.

Quieren, su tanto por ciento,

de aquella puesta de sol.

Busco, en mis argumentos,

y solo encuentro. Confusion.

Mañana, en su ejemplar,

encontrara la solucion.

Nos han cargado, con cruces, con discursos y banderas.

Nos han cegado, las luces de la modernidad.

Vi al payaso, sin su nariz de goma, indefenso.

Sin poder hacer reir,

Vi el camino, dividirse en mil senderos.

Demasiados, cuando no se sabe , a donde ir.

Vi la tumba, que  quedo a medio cavar.

Vi la silla con tres patas sosteniendote, a ti.

Y no se ,si era, el principio del fin.