EL ULTIMO STAND.II.

La gota fría hizo su recorrido por la frente de Gregor y cuando rebotó en el suelo, este se despertó de súbito de su sueño irreconciliable.

Rápidamente procedió a vestirse mientras encendía un cigarrillo de los suyos, especialmente mentolados. 

La estancia del hotel se le dibujaba más pequeña y estática, y, una vez vestido, se mintió al espejo que le decía :"No has llegado hasta el fin, nunca lo harás ".

Decididamente, no estaba de acuerdo , y lo tapó con un pañuelo .

Pensando , yo tengo la última palabra :"baby" .

Salió despacio de la habitación , buscando unas escaleras que no tenía forma de encontrar , y se introdujo en un pequeño ascensor. Allí coincidió con un extraño personaje ,al cual intentaba rehuir de su incómoda presencia. Ya , y a punto de salir de allí , el hombre extraño del elevador le amonestó:"15-27,suma de un bloque.".

Salió de allí como quien huye del diablo, y encontró un rincón acogedor en el bar salón del hotel . 

Sacudiendo las ideas negativas , asió un panfleto que se encontraba encima de la mesa el  cual rezaba:" de izquierda a derecha, cayeron los dos. ". Pero, qué demonios quiere decir, no lo sé, "no entiendo ".

Con cierta precaución, reunió los papeles intentando formar como un mensaje, cuando, finalmente, consiguió :15+27,dan 42, mi número de pie. Caí con mis dos pies, a pesar que me caí por uno. Qué es eso??",y plantó los pies en el suelo. Cuando lo hizo, notó una protuberancia debajo del pie izquierdo. Se lo descalzó, y observó su suela. Alguien había grabado un mensaje , el cual decía:" se borra el signo del símbolo a los doscientos pasos". Y buscó su reloj inteligente., pero tuvo una extraña reacción. Dios Santo!!!"

Setecientos pasos .Cielos!! Pero esto es una broma???".Según esto, hay un cierto número de pasos dados de muerto!, pero yo estoy vivo!!".

Se levantó y se fue a la barra , donde pidió una cerveza y cuando se dispuso a pagar con la tarjeta, esta fue rechazada." Oiga, camarero, me puede decir qué ocurre". Según esto lleva dos semanas caducada.".

"Está bien, de acuerdo!" ,y se fue a la calle. Intentó cruzar la carretera con la suerte que había un quiosco, y pidió un ejemplar para ver las noticias. Se dirigió a la zona de las esquelas y después de un par de minutos, señalaba , Señor O*, falleció en un intento de atraco del banco de Seatle City.

"Perdone señor, cuánto es el periódico?", y le extendió la mano.

"Oiga! "", oiga!". Pero lo le hizo caso. Rápidamente, se marchó a su
habitación de hotel , y cual no fue su sorpresa al comprobar que el contacto de su puerta no lo reconocía .Cayó al suelo descorazonado, y notó algo en su zapato izquierdo. Se lo quitó y comprobó que la suela tenía un agujero, un agujero de bala, pero no había rastros de sangre . Y dos palmos más adelante, comenzó a salir por debajo de su puerta un reguero de sangre, la sangre , su sangre . Ese era el resultado de sus pesquisas. Reconocer su hálito, de fantasma, rebelde, en otra dimensión. En el último stand, ya no había nada.

Laura Carnevali Santigosa. Noviembre 2025.